En las conclusiones preliminares de un estudio presentado hoy en INTEC, los investigadores determinaron que ese aumento de la evaporación sobre el océano genera un incremento de las precipitaciones y en la producción de agua fresca, que a su vez causa un aumento de la corriente del líquido y reduce la evaporación sobre el lago.
Advirtieron que de continuar con ese crecimiento, las consecuencias serán desastrosas para la propiedad y para los humanos residentes en el entorno del lago, que implicará el desplazamiento de comunidades.
Sostienen que esos factores, sumados a cambios en la cobertura y el uso de la tierra en las sierras que rodean el lago y a una reducción en la evaporación sobre la superficie del lago aumentarían la escorrentía por las laderas de las montañas, depositando más agua en los lagos y los acuíferos que los suplen.
Esta teoría, señalan en el informe, es consistente con reportes recientes en lugares tan distantes como China, que indican síntomas similares de crecimiento de lagos internos, debido a cambios en el clima regional, entre los cuales citan el caso del lago Nam Co, en la zona del Tíbet.
Los técnicos presentaron los resultados de un estudio durante un encuentro realizado en INTEC con técnicos de diferentes instituciones involucrados con el tema, como Medio Ambiente, Obras Públicas, el INDRHI, según reseña del Listín Diario.
El encuentro estuvo encabezado por Julio Sánchez Maríñez, vicerrector de Investigación y Vinculación del INTEC y RicardoGonzález, profesor investigador del Área de Ingenierías, junto a Joe Barba, decano de Ingeniería del City College; Jorge E. González, profesor de ingeniería mecánica del NOAA CREST y Daniel Comarazamy, investigador.